jueves, 28 de febrero de 2013

“Renuévense en su Espíritu y en su Mente” (Ef 4, 23)


       Parroquia Nuestra Señora de la Esperanza            DIOCESIS MAO MONTECRISTI

        CALLE SÁNCHEZ, # 32, ESPERANZA- VALVERDE, REP. DOM.
TEL.: (809) 585-8332


1ro. Marzo  2013

Campo de Acción: CAMBIO INTERIOR
Valor: MORAL CRISTIANA

Renuévense en su Espíritu y en su Mente (Ef 4, 23)
           
Amados y Queridos Hermanos.

Nos complacemos al dirigir a todos ustedes nuestros saludos afectuosos y fraternos. Queremos compartir con ustedes la motivación a vivir este tiempo de “La Cuaresma” como preparación profunda para la vivencia de la Pascua.
La Cuaresma es una valiosa expresión del pueblo cristiano con todos los medios que nos ofrece el Señor y la Iglesia: Oración, Palabra de Dios, Ayuno, Compartir con los más Necesitados, Penitencia en todas sus Manifestaciones; todo esto y mucho más tiene que dar como resultado un “Cambio Interior” una renovación personal, familiar, comunitaria. El cambio interior inaugura una vida nueva como expresión de la experiencia de un encuentro con el que transforma los corazones y las estructuras de pecado y refleja con transparencia al Jesús de la vida, el amor y la paz.
El Valor: “La Moral Cristiana”. Todos los seres humanos por naturaleza estamos llamados a la observancia de los valores morales y éticos y si a esto ponemos el ingrediente cristiano con mucho más razón tenemos que tomarlos en cuenta en cada una de nuestras actuaciones.
El Lema: “Renuévense en su Espíritu y en su Mente”. La renovación requiere cambios; en el comportamiento, en las actuaciones, en el/los compromisos, en la manera de elegir, en la manera de vivir la fe, en todo nuestro sentir, querer y actuar. La Cuaresma es tiempo para que nos renovemos en el espíritu y en la mente, para que en la Pascua gocemos de salud espiritual, para transmitir la Paz, Gozo, Alegría como fruto de la vivencia del resucitado.
Invitamos a unirse a la programación que prepara cada parroquia: Vía Crucis, Retiros, Caminatas, Actos Penitenciales y todo lo que ayude a alcanzar ese cambio interior para renovarnos.

Con bendiciones,


P. Santos Miguel Monción Sosa
Administrador Parroquial

Avisos:
  • Domingo 10 de marzo, caminata en contra de la violencia a la Mujer. Saliendo desde el Parque de Invi-cea a las 8 de la mañana.
  • Domingo 10 de marzo: Retiro de jóvenes, 1 de la tarde en el salón.
  • Domingo 10 de marzo: Retiro para haitianos a las 9;00 am en el salón.
  • Miércoles 13 de Marzo: Retiro de Parejas en el templo a las 8 de la noche.

miércoles, 27 de febrero de 2013

La limosna, un medio para la conversión


El hecho de compartir con los pobres lo que poseemos nos dispone a recibir ese don… La limosna educa a la generosidad del amor.” – Benedicto XVI
La Cuaresma nos invita a la conversión, y a la vez nos presenta algunos de los medios más efectivos y tradicionales para alcanzarla. Por siglos la Iglesia ha seguido el camino del compartir la abundancia con los pobres como una manera de padecer con ellos y colaborar para su mejoría.
Es importante diferenciar la limosna de la fialntropía. La limosna que practican los cristianos no tiene como fin el ganarse la fama de bondad entre la comunidad, sino que nace de la sincera caridad que persigue la plenitud del prójimo.
En palabras de Benedicto XVI, la limosna “representa una manera concreta de ayudar a los necesitados y, al mismo tiempo, un ejercicio ascético para liberarse del apego a los bienes terrenales. Cuán fuerte es la seducción de las riquezas materiales y cuán tajante tiene que ser nuestra decisión de no idolatrarlas, lo afirma Jesús de manera perentoria: “No podéis servir a Dios y al dinero”.”
¿Para qué sirve dar limosna?”
“La limosna nos ayuda a vencer esta constante tentación educándonos a socorrer al prójimo en sus necesidades y a compartir con los demás lo que poseemos por bondad divina. Las colectas especiales en favor de los pobres, que en Cuaresma se realizan en muchas partes del mundo, tienen esta finalidad. De este modo, a la purificación interior se añade un gesto de comunión eclesial al igual que sucedía en la Iglesia primitiva”
“Según las enseñanzas evangélicas no somos propietarios de los bienes que poseemos, sino administradores: por tanto, no debemos considerarlos una propiedad exclusiva, sino medios a través de los cuales el Señor nos llama, a cada uno de nosotros, a ser un medio de su providencia hacia el prójimo”.
La limosna debe ser secreta
Nuestra limosna pierde parte de su sentido y de su integridad si la damos pensando en ganar fama ante los hombres. El secreta de la limosna proviene de la sincera caridad con que la damos. Si en verdad nos preocupa que el prójimo no pase necesidades materiales  ni espirituales, pondremos en él una atención personalizada.
Al respecto, el Papa Benedicto XVI nos enseña: “El Evangelio indica una característica típica de la limosna cristiana: tiene que ser en secreto. (…) Queridos hermanos y hermanas, que esta conciencia acompañe cada gesto de ayuda al prójimo, evitando que se transforme en una manera de llamar la atención”.

martes, 19 de febrero de 2013

Historia de las estrellas


Aquella mañana un forastero venido de muy lejos caminaba por una playa hermosa y vacía del golfo de California. El sol brillaba con intensidad y le impedía ver claramente qué le esperaba más adelante. Por momentos se detenía a descansar, miraba las conchas y estrellas marinas que la marea había dejado en la playa. Al verlas pensaba: “Soy como ellas, aventadas así nada más en la arena. Mi corazón está triste. ¿Qué haré para remediarlo?”. Pero la única respuesta que obtenía era el ruido constante de las olas.
Al llegar a un punto donde comenzaba a formarse una bahía, vio a lo lejos una figura humana que se inclinaba y recuperaba la posición erguida. Una y otra vez recogía algo de la arena y con el impulso de su brazo lo lanzaba al mar. “De seguro son botellas, o basura” se dijo el viajero mientras se iba acercando.
Pasos más adelante notó que se trataba de un joven indígena, de complexión atlética, vestido sólo con pantalones de manta. Se aproximó todavía más y de repente estuvo a unos metros del muchacho. Éste detuvo su incansable tarea por un instante, lo miró atento a los ojos y le sonrió mostrando sus blanquísimos dientes.
            —Hola güero —lo saludó.
            —Hola. Vengo desde allá —el viajero señaló el comienzo de la bahía— y me llamó la atención ver que estés echando tanta basura al mar.
—No es basura, mi buen. Son estrellas —explicó el indígena y le mostró una estrella de mar que llevaba en la mano.
—¿Y para qué lo haces? —preguntó el forastero.
—Cuando la marea baja, el mar deja hartas destas en la arena. Si se quedan fuera del agua se mueren. Yo las echo de vuelta para que sigan viviendo.
            El viajero lo miró con aire burlón y le comentó:
—¿Pero apoco crees que vale la pena? En esta playa hay cientos de estrellas. ¡Y en las playas del mundo hay millones más! Aparte de todo, cuando vuelva a bajar la marea, las echará otra vez para acá. ¿Te das cuenta que si regresas una al agua la historia de las estrellas no cambia para siempre?
            El joven indígena pensó un instante, entornó con gracia los ojos y le respondió:
—Por lo menos ahorita sí cambia la historia de la que traigo en la mano. ¿Por qué no te atreves a regresarla tú al agua? —Le propuso mientras le ofrecía la estrella.
El viajero lo dudó un momento. Finalmente, con mano temblorosa, la tomó y se decidió a hacerlo. A él mismo le sorprendió que su brazo tuviera tanta fuerza para hacerla llegar así de lejos. Él y el joven indígena estuvieron en la playa hasta que se puso el sol, devolviendo una y otra estrella a las aguas profundas del mar que en un solo día fue azul, anaranjado, negro y plateado con el reflejo de la luna.
Cuando se despidieron para siempre, el caminante siguió su ruta. Paso a paso sintió que la esperanza regresaba a sus días.

lunes, 18 de febrero de 2013

Homilía del I Domingo de Cuaresma

Parroquia Nuestra Señora de la Esperanza

Homilía

Por Padre Santos Monción 

“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido; me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad y a los ciegos la vista. Para dar libertad a los oprimidos; para anunciar el año de gracia del Señor”
“Hoy se cumple esta Escritura que acaban de oír”.
v  Durante más de 30 años en Estados Unidos se leyeron las obras del Monje Raymond y una de ella se tituló: “Católico, está usted llevando una vida peligrosa”, una llamada al cambio de actitud.
v  Comprendo que muchas veces nuestras parroquias se convierten en remolinos de patio; estos remolinos remueven hojas secas y basura. Tenemos que cuestionarnos.
Mientras tanto por ahí afuera hay cuestiones muy complejas:
Durante esta semana la prensa mundial ha estado informando sobre la renuncia del papa Benedicto XVI. Nuestro papa, nuestro pastor, nuestra guía espiritual.
Las burlas a la que ha sido sometido el Papa han sido increíbles y de todas las índoles, incluso mostrando que hay mafia dentro de la Iglesia que buscaban la renuncia del Papa.
Recuerdo cuando Benedicto inició su pontificado, nosotros los que estamos llamados a ser sus más fieles colaboradores, lo criticábamos comparándolo con Juan Pablo II, lo llamábamos seco, que no tenía carisma, carita de vieja, entre otras cosas. Le faltamos al vicario de Cristo, y la pregunta sería, cual de nosotros tiene una foto de Benedicto en la Casa? El papa inició un ministerio en la incomprensión de los que guiaría, pero ahora renuncia y también lo hace en la incomprensión, y nosotros dejamos que se traguen su trabajo, su esfuerzo, su legado, le hemos vuelto a faltar a Benedicto, no hemos hecho nada para que no acaben con él. No lo queríamos, renuncia ahora lo queríamos…
Hasta cuándo tendremos la boca callada, hasta cuando este hermetismo que no nos deja avanzar, preferimos callar e incluso a algunos les gusta venir a la misa porque no tienen que hablar y uno solo es el que habla. Cuando vamos a salir del anonimato, cuando me dejaré fluir el Espíritu que vive en mi y pasaré a la Presencia de Dios. Hay gente que siempre que se pasa lista está ausente.
Mientras tanto nuestro planeta agoniza por pobreza mental, pobreza afectiva, espiritual, económica, clima y agua. Nos tienen estrangulados, esclavizados, amordazados, dormidos bajo la droga colectiva del placer y la mentirosa globalización que nos ofrece calidad total.
El enemigo es poderoso y nosotros estamos dejando que nos desvíen la atención, no sólo el narcotráfico, el terrorismo, la miseria de las prácticas sexuales, porque si a eso vamos dónde están los mayores consumidores de drogas? Y no son los países desarrollados los terroristas de las guerras pasadas?
El problema del Planeta es la justicia, es la paz, es la alegría, es la libertad, es la esperanza, es la educación integral, es la salud, es la misma vida. Necesitamos acciones concretas, atrevidas, generosas pero ahora mismas y nosotros que somos pobres debemos tener mayor responsabilidad, más educación y disciplina.
Y el espíritu del Señor está sobre nosotros… déjalo entrar y déjalo que ten unja…que nos dé un corazón de carne y no de piedra. La humanidad doliente espera hombres de Espíritu Santo. Hombres de Verdad.
Sobran la mediocridad, la vulgaridad y el egoísmo. ¡Qué llamada más sublime! De los violentos es el Reino. Violencia contra el mal. Para devolver la esperanza y la alegría, necesitamos hombres y mujeres libres.
¿Y quiénes son los libres? Aquellos que se dejan conducir por el Espíritu y rompe las cadenas, e ilumina oscuridades. Quien vive la verdad sobre la vida está lleno del Espíritu de Dios.
El miserable chismecito parroquial y propio de corazones cobardes  se cultiva en la parroquia cuando en vez de estar despiertos a la hiriente y escandalosa situación del pueblo y de la tierra andamos enredados en cuestiones rastreras. Dice san Pablo a Timoteo que “Las habladurías son propias de mujeres viejas”.
Los Herodes del comienzo, los Domicianos, los Nerones, los Cesares imperiales, la bestia del Apocalipsis; asesinaron a mucho de nuestros hermanos del comienzo, pero los débiles hermanos nuestros de aquel tiempo se dejaron ungir por el Espíritu y vivieron en alegría, la fraternidad, la esperanza, la fortaleza, los desafíos.
Sin embargo, los imperialistas, las bestias asesinas, los cesares cayeron –se pudrieron- y los mártires nuestros quedaron como rocas inmortales. Los poderes de hoy como los de ayer se secarán.
Quien no quiera dejarse ungir por el Espíritu de Cristo y prefiera pastores que complazcan sus caprichos de malcriados no sirve para el reino de los cielos; no es esta parroquia una pensión barata para fieles sin vida, esto no es una fonda espiritual. Esta Iglesia está llamada a ser una barca llena de discípulos bautizados, comprometidos por la unción del espíritu. 
Nuestro papa nos ha dado una lección de amor, de humildad a nosotros que muchas veces nos creemos eternos y que nos enarbolamos como dictadores de las posiciones que ostentamos. Nos dice en su texto de renuncia: "No estamos llamados a salvar a la Iglesia, sino a servirla, y si no puedes más la sirve de otro modo, de rodilla y rezando; la salvación es una cuestión que atañe a Cristo. La Iglesia no es nuestra es de Cristo" (Benedicto XVI).   El problema está en el servicio, desde que comprendamos que nuestra vida cristiana es servicio, inmediatamente venceremos la tentación del poder, y nos daremos cuenta que se sirve siendo papa o no, porque lo importante no es el título, sino el servicio.
Benedicto venció las tres tentaciones del hambre de fama y de estatus, de reconocimiento y de poder, se despojó como Cristo de todo, para quedarse humilde y sereno, sirviéndole a la Iglesia como ella lo necesita ahora, con oración y rodillas
Y como no comprendemos las nociones del Espíritu vivimos entonces hablando mal, que debe ser americano, que debe ser Latinoamérica, que debe ser africano, que debe ser europeo, carajooooooo entiende la Escritura: debe ser el que el Espíritu Elija, debe ser servidor y puntooooooooo.
Muchos me dicen que la Iglesia tiene que renovarse, tiene que cambiar y yo les digo que si tenemos que cambiar, pero el cambio debe ser dejar la flojera, dejar la tibieza, muchas veces no les exigimos a nuestros fieles que se comprometan en la causa con excusas baratas de que son pobres, de que no tienen tiempo, sin embargo, cuando se van a otra religión aparece el tiempo, aparece el dinero para predicar aparece la disponibilidad, debemos cambiar pero para ser más exigentes con las riquezas del reino, porque le estamos echando las perlas a los cerdos. 

miércoles, 13 de febrero de 2013

MIÉRCOLES DE CENIZA


Conoce el significado e importancia del miércoles de Ceniza como el inicio formal a la Cuaresma
El miércoles de Ceniza es el principio de la Cuaresma; un día especialmente penitencial, en el que manifestamos nuestro deseo personal de conversión a Dios.
Al acercarnos a los templos a que nos impongan la ceniza, expresamos con humildad y sinceridad de corazón, que deseamos convertirnos y creer de verdad en el Evangelio.
El origen de la imposición de la ceniza pertenece a la estructura de la penitencia canónica. Empieza a ser obligatorio para toda la comunidad cristiana a partir del siglo X. La liturgia actual, conserva los elementos tradicionales: imposición de la ceniza y ayuno riguroso.
La bendición e imposición de la ceniza tiene lugar dentro de la Misa, después de la homilía; aunque en circunstancias especiales, se puede hacer dentro de una celebración de la Palabra. Las fórmulas de imposición de la ceniza se inspiran en la Escritura: Génesis, 3, 19 y Marcos 1, 15.
La ceniza procede de los ramos bendecidos el Domingo de la Pasión del Señor, del año anterior, siguiendo una costumbre que se remonta al siglo XII. La fórmula de bendición hace relación a la condición pecadora de quienes la recibirán.
El simbolismo de la ceniza es el siguiente:
a) Condición débil y caduca del hombre, que camina hacia la muerte;
b) Situación pecadora del hombre;
c) Oración y súplica ardiente para que el Señor acuda en su ayuda;
d) Resurrección, ya que el hombre está destinado a participar en el triunfo de Cristo;
La ceniza es el residuo de la combustión por el fuego de las cosas o de las personas. Este símbolo ya se emplea en la primera página de la Biblia cuando se nos cuenta que "Dios formó al hombre con polvo de la tierra" (Gen 2,7). Eso es lo que significa el nombre de "Adán". Y se le recuerda enseguida que ése es precisamente su fin: "hasta que vuelvas a la tierra, pues de ella fuiste hecho" (Gn 3,19).
Por extensión, pues, representa la conciencia de la nada, de la nulidad de la creatura con respecto al Creador, según las palabras de Abrahán: "Aunque soy polvo y ceniza, me atrevo a hablar a mi Señor" (Gn 18,27).
Esto nos lleva a todos a asumir una actitud de humildad ("humildad" viene de humus, "tierra"): "polvo y ceniza son los hombres" (Si 17,32), "todos caminan hacia una misma meta: todos han salido del polvo y todos vuelven al polvo" (Qo 3,20), "todos expiran y al polvo retornan" (Sal 104,29). Por lo tanto, la ceniza significa también el sufrimiento, el luto, el arrepentimiento. En Job (Jb 42,6) es explícítamente signo de dolor y de penitencia. De aquí se desprendió la costumbre, por largo tiempo conservada en los monasterios, de extender a los moribundos en el suelo recubierto con ceniza dispuesta en forma de cruz. La ceniza se mezcla a veces con los alimentos de los ascetas y la ceniza bendita se utiliza en ritos como la consagración de una iglesia, etc.
La costumbre actual de que todos los fieles reciban en su frente o en su cabeza el signo de la ceniza al comienzo de la Cuaresma no es muy antiguo.
En los primeros siglos se expresó con este gesto el camino cuaresmal de los "penitentes", o sea, del grupo de pecadores que querían recibir la reconciliación al final de la Cuaresma, el Jueves Santo, a las puertas de la Pascua. Vestidos con hábito penitencial y con la ceniza que ellos mismos se imponían en la cabeza, se presentaban ante la comunidad y expresaban así su conversión.
En el siglo XI, desaparecida ya la institución de los penitentes como grupo, se vio que el gesto de la ceniza era bueno para todos, y así, al comienzo de este período litúrgico, este rito se empezó a realizar para todos los cristianos, de modo que toda la comunidad se reconocía pecadora, dispuesta a emprender el camino de la conversión cuaresmal.
En la última reforma litúrgica se ha reorganizado el rito de la imposición de la ceniza de un modo más expresivo y pedagógico. Ya no se realiza al principio de la celebración o independientemente de ella, sino después de las lecturas bíblicas y de la homilía. Así la Palabra de Dios, que nos invita ese día a la conversión, es la que da contenido y sentido al gesto.
Además, se puede hacer la imposición de las cenizas fuera de la Eucaristía -en las comunidades que no tienen sacerdote-, pero siempre en el contexto de la escucha de la Palabra.

martes, 12 de febrero de 2013

El labrador y el águila


A media tarde, en lo profundo del bosque, iba caminando Martín el labrador. Solía regresar a casa a esa hora, cansado por el trabajo que desarrollaba en un huerto de duraznos jugosos
y aromáticos. Siguiendo el atajo que conocía para llegar a su hogar, escuchó un batir de alas cerca del manantial.
Se volvió para ver de qué se trataba. Era un enorme águila de cabeza blanca, negro plumaje y pico amarillo. Alguien la había atrapado y la mantenía sujeta de la pata derecha empleando una cadena fija a un árbol. Daba tristeza ver sometido a un animal tan acostumbrado a las alturas. Además, en el bosque estaba prohibido cazar…
Con gran decisión, Martín se acercó al árbol. De su mochila sacó algunos instrumentos que usaba para su trabajo y separó la cadena del tronco. Sin embargo, el águila no podía volar, pues el cepo pesaba mucho. Con cuidado y detenimiento (aun con el riesgo de sufrir un picotazo) el labrador se lo quitó y el ave se elevó en el cielo, libre al fin.

El labriego siguió su camino. Comenzó a sentirse fatigado y pensó en hacer un alto. Pasos más adelante encontró la barda de piedra situada al borde de la cañada. Decidió subir y sentarse en la cima para reposar mientras disfrutaba la puesta de sol.
Una vez allí vio volar bajo al águila que había rescatado. De repente el ave planeó, se le acercó a unos cuantos centímetros y, con el pico, le quitó de la cabeza el sombrero de piel que portaba. Luego voló y voló.
—¡Hey! ¡Dame mi sombrero! —gritó Martín.
Cuando vio que el águila no regresaba, bajó de la barda y comenzó a correr tras ella. Poco más allá, donde comienza el sendero que lleva al pueblo, el águila simplemente dejó caer el sombrero. Martín lo recuperó entre las ramas de un árbol y pensó “Vaya con este extraño animal. ¿Por qué habrá actuado así?”
Al día siguiente, muy temprano, cuando se dirigía al huerto, Martín notó que la barda de piedra, humedecida por la lluvia de varias semanas, se había venido abajo. El águila le había quitado el sombrero para hacerlo bajar de ella y salvarle la vida. Así recompensaba la amistad de quien la había liberado.

lunes, 11 de febrero de 2013

Primera Parte del Tema ¿Qué es la cuaresma?


La Cuaresma es el tiempo litúrgico fuerte en el que los cristianos nos preparamos a celebrar, “teniendo en cuenta el doble carácter de este tiempo”, el misterio pascual,Conoce la importancia de este “Tiempo fuerte” como lo califica la Iglesia, su origen y desarrollo en la historia, así como los aspectos que hay que cuidar durante estos cuarenta días.

La Constitución Sacrosantum Concilium sobre la Sagrada Liturgia (4-XII-1963, n. 109-110), considera a la Cuaresma como el tiempo litúrgico fuerte en el que los cristianos nos preparamos a celebrar, “teniendo en cuenta el doble carácter de este tiempo”, el misterio pascual, mediante la conversión interior, el recuerdo o la celebración del Bautismo, la participación en el sacramento de la Reconciliación, participando en las acciones “penitenciales, individuales y colectivas”.
Para lograr estos objetivos, se invita a la escucha y a la meditación de la Palabra de Dios, la oración, personal y comunitaria, “encareciéndose la oración por los pecadores”, y la puesta en práctica de los medios ascéticos tradicionales, como son, la abstinencia y el ayuno, —“el sagrado ayuno pascual”—, y la limosna.

I.- Síntesis histórica de la celebración de la Cuaresma.
Se suele afirmar que tiene una historia y una prehistoria.
1.- La prehistoria
Desde finales del siglo II, la preparación pascual era de dos días, de ayuno riguroso de carácter escatológico. En la Didascalia, se dice que dura una semana, y este ayuno tiene además, un sentido ascético.
En Roma, a finales del siglo III, la preparación era de tres semanas, en las que se ayunaba diariamente, excepto sábados y domingos.
2.- La historia
El nacimiento de la Cuaresma, tiene lugar en el siglo IV, según el testimonio de Eusebio (ca. 332), consolidándose tanto en Oriente como en Occidente.
Hacia el año 385 la preparación pascual, se alargó a seis semanas, también con ayuno diario, con las excepciones indicadas, excluyéndose el viernes y el sábados últimos, pertenecientes al Triduo Sacro. El ayuno cuaresmal, empezaba el primer domingo de cuaresma. A finales del siglo V los ayunos ya establecidos del miércoles y viernes anteriores a ese domingo ganaron en importancia y se convirtieron en preparación para el ayuno pascual.
3.- La evolución cuantitativa en el cómputo de ayuno
Durante los siglos VI-VII, varió el cómputo del ayuno, pasando del primer domingo de cuaresma, al Jueves Santo incluido, es decir una Quadragesima, es decir, —cuarenta días—, a una Quinquagésima, o sean cincuenta días, contados desde el domingo anterior al primero de Cuaresma, hasta el de Pascua; a una Sexagésima, que retroceden un domingo más y terminan el miércoles de la octava de pascua, y finalmente a una Septuagésima, que serían sesenta días, ganando un domingo más y concluyendo el segundo domingo de pascua. Este nuevo período tenía carácter ascético y debió introducirse por influencias del Oriente.
Esta evolución cuantitativa se extendió también a las celebraciones. En efecto la Cuaresma más antigua en Roma sólo tenía dos días litúrgicos, los miércoles y los viernes, y se hacía una statio en una iglesia diferente. Posteriormente en tiempos de San León Papa (440-461), se añadieron los lunes. Posteriormente, los martes y los sábados. Durante el pontificado de Gregorio II (715-731), se agregará el jueves y se completa la semana.

Oración al Sagrado Corazón de Jesús

Oración al Sagrado Corazón de Jesús para una grave necesidad (rezar por tres días). Oh Divino Jesús que dijiste: «Pedid y recibiréis; b...